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jueves, 29 de mayo de 2008

¿Qué hay que saber acerca de sobrepeso, obesidad y ejercicio?

  • Obesidad es un porcentaje de grasa corporal alcanzado en el cual aumentan los riesgos de enfermedades tales como diabetes, hipertensión, cardiovasculares y osteoarticulares.
  • Se habla de sobrepeso cuando el aumento es no mayor del 10% con respecto a un peso determinado por un índice de masa corporal de uso frecuente.
  • Los mejores métodos para diagnosticar la obesidad son lo que miden la cantidad de grasa y su distribución.
  • No es lo mismo sobrepeso que obesidad. Un atleta tiene sobrepeso y sin embargo, no está gordo. Un adulto mayor puede tener exceso de grasa, disminución de la masa muscular y osteoporosis. No pesa más de lo normal, pero no es normal.
  • Ambos son consecuencia de un estilo de vida sedentario y no es frecuente que se trasladen genéticamente.
  • Se puede distinguir entre obesidad ginoide y obesidad androide. La primera también llamada periférica es más propia de las mujeres y trae consecuencia menos graves para la salud, como las várices. La otra, también llamada central o abdominal, es frecuente en hombres y mujeres posmenopáusicas y puede traer complicaciones cardiovasculares y diabéticas, además de subir la frecuencia de cáncer de útero y mama.
  • La anorexia y la bulimia son enfermedades graves.
  • La causa de los fracasos en los programas de descenso de peso se deben a que ellos:
  1. Se estructuran sobre una sola variable: las dietas restrictivas.
  2. No se incorpora el ejercicio.
  3. No se considera que la obesidad es una enfermedad aguda y arbitrariamente se decide bajar de peso en 7 días sin tenerse en cuenta los años de exceso de peso.
  4. La dificultad que presenta lograr cambios en la conducta y en los roles del obeso.

Cuando la variable es la dieta, ocurren 4 fenómenos:

  1. El metabolismo baja.
  2. Sobreviene la sobrealimentación.
  3. Se aumenta por sobre el peso inicial.
  4. Aparecen cambios en la personalidad.

De manera que las dietas fracasan porque la gente deja de cumplirlas. Por eso, los hábitos alimentarios y el ejercicio deben ser mantenidos durante toda la vida. Esto lleva a descalificar las dietas que pretenden grandes logros en poco tiempo o las que se llevan a cabo sin asesoramiento médico.

  • Los aspectos metabólicos se contrarrestan modificando las dietas para reducir proporcionalmente las calorías. Entonces, el paciente no vuelve a engordar. Esto destruye la teoría de que ciertas personas “comen una galletita y engordan”.
  • Muchas de las dietas más conocidas –como la Scardale- por ejemplo, son directamente peligrosas. Una buena dieta es la que, además de complementarse con ejercicio, permite comer todas las cosas que a uno le gustan, pero en distinta cantidad y frecuencia.
  • El estrés también contribuye a la obesidad porque genera en el organismo conticosterona, que favorece a la producción de grasas.
  • No debería seguirse una dieta que proporcione menos de 1200 calorías diarias.
  • La pérdida de peso máxima no debe ser superior a 1 kilo por semana. Bajar demasiado rápido de peso es fatal. Las dietas rápidas han mostrado que pueden acarrear complicaciones cardiovasculares importantes.
  • Para eso hay que proporcionar un equilibrio calórico negativo, sin exceder las 500 a 1000 calorías por día.
  • La actividad física debe producir un gasto de 300 o más calorías de 5 a 7 veces por semana, para que sea eficaz en un programa de descenso de peso.
  • Un descenso de peso conseguido únicamente a través de la dieta, provoca disminución de la tasa metabólica en reposo y sólo se pierde entre el 50 y el 75% de grasa: el resto es masa muscular.
  • En cambio, un descenso producido por el ejercicio supone un aumento de la tasa metabólica en reposo, un aumento adicional de calorías durante el período posejercicio y del consumo calórico que se produce durante los procesos digestivos. Además, el descenso se consigue a expensas del tejido graso, no del tejido muscular.
  • Es bueno tener presente que, frecuentemente, hacer actividad física no se traduce en una pérdida significativa de peso. Eso se debe a un aumento de la masa magra que pesa más pero mide menos que el tejido graso.
  • La solución ideal puede ser un abordaje que incluya dieta y ejercicio.

1 comentario:

lencha dijo...

felicitaciones....buen articulo con respecto al sobrepeso y la obesidad.......hacer enfasis al publico en recibir atencion interdiciplinaria es importante, la atencion de un nutriologo, un preparador fisico y un psicologo garantiza el exito del tratamiento...

saludos